-Tiene cara de buen niño. ¿Por qué no es bueno Dani Martínez?
-Eso me dicen los señores de mi pueblo. Al final me lo he creído.
-¿Con cuál de las 200 imitaciones que hace se siente más cómodo?
-Con la de Boris Izaguirre. Es el que más años llevo haciendo y la verdad es que podría estar horas metido en ese personaje porque no me canso.
-¿Cómo demuestra en el espectáculo que no es oro todo lo que reluce?
-Para ello me ayudo de vídeos, músicas, canto, bailo, imito... Todo para dejar claro que no soy tan buen chaval como parece.
-¿El público también forma parte de su espectáculo?
-Totalmente. Encenderé la sala en varios momentos y hablaré e improvisaré con ellos. Que vengan preparados.
-¿Las tecnologías también están presentes en el escenario?
-¡Sí! Lo manejo todo desde el escenario. Es que me ahorraba un técnico.
-¿Cuáles son las claves de un buen monólogo?
-Que sea diferente y que no solo sea un monólogo. Hay que tunearlo, que no sea lo de siempre.

-¿Dónde se siente como en su casa, sobre las tablas de un teatro o en la pequeña pantalla?
-En el teatro eres tú al cien por cien. Me gusta mucho más. Nadie te dice qué debes hacer y yo soy muy rebelde.
-¿Dani y Florentino Fernández cuando están juntos son unos gansos?
-El 90 por ciento de las veces.
-¿Qué le deparará al espectador el programa Sopa de gansos que se estrenará en 2015 en Cuatro?
-Es un homenaje a la comedia. Cómicos de ayer, de hoy y los que lo petarán mañana, pasarán por el escenario. Flo y yo seremos los maestros de ceremonias.
-También entra en el Chiringuito de Pepe. ¿Qué tiene de especial el personaje David Kalifornia?
-Es un tarado. Se ha ido por el mundo a vivir experiencias y ha quedado un poco tocado de la cabeza. Es muy divertido y creo que va a dar mucho juego.
-¿Qué conlleva incorporarse a una de las series revelación de la temporada televisiva?
-Responsabilidad y mucho respeto. Ellos son los que saben, yo sigo aprendiendo.
-¿La política española y los casos de corrupción dan para muchos monólogos?
-Dan para monólogos y para muchas manifestaciones. La realidad supera la ficción, pero en España no hemos querido que nuestra realidad sea Disney, somos más de El Padrino.
-¿Es España un buen escaparate del humor?
-Yo creo que sí. La gente en España es divertida de norte a sur y de este a oeste. Hay una gran cantera de cómicos que vienen y muchos otros que siguen dando guerra.
Diario de Mallorca 22.11.14